Se trata de un tema relajado y distendido que fusiona elementos del pop con la esencia del pasado, como en 1999. “Una letra que nos lleva a aquellos himnos dedicados a los amores de verano, a la nostalgia de esos sentimientos que parecían eternos y quedaron en la memoria”, mencionan desde la banda.
La canción tuvo un par de versiones previas, hasta que surgió la idea de convertirla en una colaboración con los Kchiporros, por dos razones, el despertar de ese espíritu nostálgico y porque era un pendiente para ambas bandas trabajar juntos.
Este es el segundo adelanto del próximo álbum de Villagrán, producido por El Chávez – con quien ya trabajaron en El Ritmo Subtropical y Sonidos Siderales – y Mauri Roman, en el estudio Ciudad Nueva en Asunción. El mix es de El Chávez y a cargo del máster estuvo Andrés Mayo.
El grupo paraguayo se encuentra atravesando por una nueva etapa en la que próximamente darán a conocer más canciones entre otras novedades.
Integran Villagrán Miky González (guitarra y voces), Karim Manzur (guitarra y voces), Mauri Roman (batería y voces), Maxi Bonnin (teclados, sintetizadores y voces) y Miki Napout (guitarra y voces).
Además Villagrán, integra el soundtrack de “DNA do Crime”, a través de las canciones “Picho” y “Sonidos Siderales – Ft. Fernando Santullo”, las cuales aparecen en los episodios, 2 y 7.
Los temas fueron compuestos por autores paraguayos en su mayoría y la gestión con Netflix se dio a través de Apoha Music E.A.S., primera administradora de derechos musicales del Paraguay.
